Yayoi Kusama es una artista muy reconocida a nivel internacional desde hace décadas. En los años 60 crea sus instalaciones más afamadas en los Estados Unidos, realizando sus aportaciones personales al entonces vigente arte pop y psicodélico. En 1988 se la homenajea mediante grandes retrospectivas en los EEUU y Tokio y en el 2011, el Museo Reina Sofía organiza una exposición individual que se extiende después al Centro Pompidou de París, la Tate Modern de Londres y otras instituciones de América Latina. Sus obras más llamativas son las instalaciones con globos, luces, espejos, juguetes, formas y colores psicodélicos en los que aparece ella misma como un elemento artístico más. Además, también interviene en performances y películas, crea esculturas para espacios públicos, escribe novelas, diseña, dibuja, pinta y hace collages.
Pero en la vida de Kusama no todo es color y psicodelia. Tras su larga etapa norteamericana, se encuentra mentalmente agotada y debilitada, por lo que en 1973 regresa a su Japón natal y toma la decisión de internar de forma voluntaria y definitiva en un hospital psiquiátrico, donde sigue residiendo a día de hoy. Ya en su niñez sufre experiencias muy traumáticas que condicionan su equilibrio emocional: aparentemente, su madre la instaba a observar cómo su padre mantenía relaciones sexuales con geishas, obligándole después a relatarle minuciosamente todas las escenas. Según la artista, estas vivencias le originan severas patologías mentales como alucinaciones, depresiones y tendencias obsesivas. En la actualidad, prosigue con su labor artística en su estudio de Tokio, regresando por las noches al sanatorio que tiene por hogar.
En sus palabras, su arte le ayuda a sobrevivir al dolor y al deseo de la muerte. Su obra es divertida, extravagante, alocada, colorida, original, chirriante, kitsch, pop, psicodélica… Los lunares de colores son su sello de identidad, aludiendo al sol, la luna y la tierra.
¿Y tú? ¿Qué opinas de la obra de Kusama?
¿Y de su historia?
¿Crees que todo genio debe parte de su creación a sus experiencias dramáticas?
¿Existe un componente de locura en el arte?
No te cortes: ¡opina!
Página oficial de Yayoi Kusama:
EL OJO CACODILATO 
jum… sabia de su existencia como artista, pero de su obra no sabia nada, de hecho me pensaba que era una artista joven. Realmente con tu entrada y con mi interes por el arte outsider, si que veo en su obra elementos muy propios de el «estilo» outsider comola extremada acumulacion de formas… la repeticion y la densidad… los colores tan llamativos tambien me atreveria a decir… No se que tanto de «loca» debe tener… pero si, esta claro que a traves de su obra se libera de sus experiencias traumaticas! Siempre se aprende una cosa nueva!!!
Un saludo!
Es cierto que una gran parte del arte marginal refleja estados mentales extremos y mundos de fantasía muy personales, y que suelen usarse materiales y técnicas muy originales. Sin embargo, parece que Kusama sí cuenta con el apoyo de las instituciones artísticas, ya que su primer arte se enmarca en Estados Unidos dentro de las corrientes Pop y posteriormente cuenta con un gran reconocimiento internacional, latente en las exposiciones que le brindan los museos más importantes. Sin embargo, sí existen elementos en común con algunos outsiders, se me ocurre por ejemplo Eijiro Miyama, a quien conocí gracias a tu post «Elogio al arte outsider»,
Creo que te ocupas de un tema muy interesante dentro de la historia del arte contemporáneo.
Un saludo Giovanna!
Si, un caso bastante interesante, que efectivamente sucita todas esas reflexiones que haces… Las mismas que creo aporta el arte outsider. (Mucho que decir sobre el arte a partir de su contrario!!)
Gracias a ti por leerme y dedicarme tu tiempo! Me ha encantado esta entrada! voy a investigar mas sobre esta artista!